Los santos misioneros cordobeses son nuestra brújula en la misión.
Uno de ellos es Santo Domingo de Henares, natural de Baena.
Nació el 19 de diciembre de 1766, en la localidad de Baena, Córdoba. Fue bautizado en la Parroquia de San Bartolomé el 21 de diciembre del mismo año.
Tomó el hábito de fraile dominico el día 30 de agosto de 1783 y profesó un año después. Asignado a las Misiones que la Provincia del Rosario tiene en Extremo Oriente, parte de Cádiz en septiembre de 1785 rumbo a Puerto Rico de Cuba, México y Filipinas a donde desembarca el 9 de julio de 1786. El 30 de este mismo mes y año se une a los cursos de la Universidad de Santo Tomás de Manila, en la que concluirá sus estudios, al mismo tiempo que imparte clases de Humanidades.
A finales del año 1789 se ordena presbítero y es destinado a las Misiones de Tonkín (hoy al norte del Viet Nam) donde consigue llegar el 28 de octubre de 1790. El 9 de enero de 1802 es consagrado obispo. Es detenido y preso el 9 de junio de 1838.
Después de varios interrogatorios fue sentenciado a muerte. El rey aprobó la sentencia el 19 de junio y el 25 de ese mismo mes, a la una de la tarde, fue decapitado.
Es declarado Beato por León XIII el 27 de mayo de 1900 y canonizado por Juan Pablo II el 19 de junio de 1988.
Sé el primero en comentar en «SANTO DOMINGO DE HENARES (EL SANTO DE BAENA).»